Diferencias y beneficios de ambas tecnologías
¿Baterías de Litio-Ion o Baterías de Plomo-Ácido?Uno de los objetivos principales de las empresas logísticas es alcanzar la eficiencia energética. Sin embargo, la elección de la solución energética más favorable para nuestra flota requerirá de un estudio pormenorizado de las necesidades de la compañía (sector, operativa diaria, volumen de mercancías, etc.), una evaluación de los costes y la disposición de nuestras instalaciones, entre otras cosas.
En la actualidad podemos encontrar en el mercado una gran variedad de tecnologías entre las que escoger: Baterías de Litio-Ion, Baterías de Plomo-Ácido, Pilas de combustible, Diésel, GLP o GNC.
Si observamos el volumen de carretillas eléctricas presentes en el mercado, podemos ver como año tras año su porcentaje va aumentando de forma exponencial en todos los sectores y aplicaciones. La tecnología de baterías se encuentra en continuo desarrollo por los diferentes proveedores de equipos de manutención ya que esta tecnología ofrece una solución altamente eficiente y segura para conseguir el máximo rendimiento y operatividad.
En esta entrada del blog exploraremos las tecnologías de baterías de Litio-Ion y Plomo-ácido.
¿Qué batería es mejor? ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de los diferentes tipos de baterías?
La respuesta a la pregunta dependerá de las necesidades específicas y la operativa de tu negocio. La solución energética más eficiente para ti puede no ser la mejor para otra compañía. Por eso, a continuación vamos a desarrollar las principales diferencias y beneficios de cada tecnología que te ayudarán a elegir la solución perfecta para tus carretillas.
La principal diferencia entre ambas baterías radica en el nivel de exigencia de la aplicación: si el uso de su carretilla elevadora se centra únicamente en un solo turno de trabajo (es decir, un nivel de exigencia bajo a medio), se dispone de tiempo suficiente para cargar las baterías, cambiarlas cuando se requiera y realizar un mantenimiento regular; las baterías convencionales de plomo-ácido pueden ser la solución más adecuada.
Si por el contrario la actividad operativa de la compañía está altamente sincronizada, posee varios turnos de trabajo y es necesario un rendimiento elevado, la tecnología de litio-ion es la más adecuada.
Una batería de Litio-Ion puede reemplazar entre tres y cuatro baterías de plomo-ácido en una operación de tres turnos
Baterías de Litio-Ion
Las baterías de litio-ion ofrecen numerosas ventajas: tienen una mayor densidad de energía, una mayor eficiencia y un ciclo de vida más largo. Las baterías de plomo ácido permiten 1.500 ciclos de vida, mientras que la tecnología de las baterías de litio ofrece una duración de hasta 2.500 ciclos. Además, requieren mucho menos mantenimiento que las baterías de plomo-ácido y no es necesario su cambio.
La combinación de batería Litio-Ion y el correcto cargador aumenta en hasta un 30% la eficiencia global frente a las baterías de plomo-ácido. Esto se traduce en una reducción de los costes energéticos: la tensión constante evita la pérdida de rendimiento incluso a medida que desciende el nivel de carga de la batería.
Además, dado que la batería ya no emite gases, se puede prescindir de inversiones adicionales tanto en áreas de carga de baterías como en sistemas de ventilación.
La gran densidad energética de estas baterías permite, a diferencia de las baterías de plomo-ácido más tradicionales, disponer de una mayor capacidad en un mismo espacio.
No obstante, a pesar de la gran capacidad de almacenamiento, la capacidad de las baterías de litio-ion actuales no siempre es suficiente en todos los casos cuando se trata de permitir una operación de tres turnos. Para una operación continua de dos o incluso tres turnos, será necesario realizar cargas parciales que pueden coincidir con el descanso de los operarios a lo largo de la jornada. Esto permite evitar continuos cambios de batería y costes añadidos.
Para alcanzar la máxima eficiencia es necesario elaborar estrategias de trabajo y carga especialmente adaptadas con tiempos de carga intermedios-cortos para los usuarios que tienen estos requisitos.
Baterías de Plomo-ácido
Las baterías de plomo-ácido ofrecen una tecnología más que conocida y de gran prestigio. Éstas son algo más económicas en términos de mantenimiento que los motores térmicos y además están indicadas para el uso en interiores gracias a sus bajas emisiones.
Sin embargo, su ciclo de vida es más corto, por lo que en aplicaciones exigentes será imprescindible realizar cambios de batería u optar por otro tipo de tecnología.
Estos cambios de batería suponen disponer de instalaciones adecuadas de carga con una correcta ventilación, así como maquinaria auxiliar que permita realizar la sustitución y desplazamiento de las baterías.
Además, debido a su composición a base de ácido sulfúrico y agua, la incorrecta manipulación de las mismas puede ocasionar riesgos de quemaduras o posibles incendios si no se habilita un espacio suficientemente ventilado.
Si observamos la tasa de auto-descarga (entendida como la pérdida de energía cuando la carretilla no es utilizada) en las baterías de plomo-ácido se observa de media entre el 6 y el 10% del total en un mes entero sin uso, mientras que en las baterías de litio-ion esta tasa se reduce al 1% en el mismo periodo de tiempo.
Resumimos las principales diferencias entre las baterías de Litio-Ion y las baterías de plomo-ácido de un vistazo:
Comparativa baterías de plomo-ácido y litio-ion
En definitiva, las baterías de litio-Ion ofrecen múltiples ventajas frente a las baterías convencionales de plomo-ácido. Sin embargo, es necesario estudiar correctamente la viabilidad de cada tecnología frente a la operativa de cada cliente.
Si bien es cierto que ambas tecnologías de baterías permiten adaptar el sistema de energía de una carretilla elevadora exactamente a la aplicación correspondiente, se deberá contar con un proveedor de confianza para que realice un estudio exhaustivo de sus necesidades específicas. De esta forma, recibiremos una solución energética eficiente adaptada exactamente a nuestras necesidades. En algunos casos se alcanzará una mayor eficiencia utilizando la tecnología de baterías litio-Ion o plomo-ácido, mientras que en otras ocasiones la tecnología de motores de combustión puede ser la solución más idónea.